Tras visitar La Vilella Baixa decidí acercarme hasta Margalef ya que la distancia es bastante corta.
Por culpa de una carretera cortada tuve que dar una gran vuelta para llegar, pero viendo como bajaba el río, ya intuía que el embalse estaría rebosando y el esfuerzo merecería la pena.
Poco después de entrar en el camino que conduce al embalse, el río nos ofrece este imagen
De estas rocas bajaban pequeños arroyos
Y al acercarme a la presa esto es lo que se ve
Como en este embalse se puede ir hasta tocar la presa, la sensación es mucho mayor
Una imagen del río
Y ahora unas vistas desde algo más alto
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